Quizas me equivoque, quizas solo me lo imagine, quise darle algo más de sentido a esa vocesita dentro de mi que me decía: Debes creer de nuevo y ser distinta, lo intente, parecía dificil al comienzo, pero después se fue haciendo más complicado, era más que dificil fingir que debía creer y actuar distinto cuando sabía que podía ser una decepción más y lo peor era el miedo
a ser rechazada cuando estaba más que involucrada, así se fue dando supe que no era lo correcto pero no tenía otra opción, era eso o tener que pasar el resto de mi vida sola y fracasada en ese aspecto, odiaba sentirme frustrada
tanto que opte por darle permiso a la vocesita para que me dijera todo lo que
tenía que hacer, y así fue, le hice caso, la deje tomar las decisiones en todo ese
lapso de tiempo, ya hasta me había acostumbrado, de ser dificil en algún tiempo todo se fue haciendo más y más fácil, era como algo mecanizado, creí incondicionalmente y di todo de mi para que al menos pareciera que funcionaba, pero más tarde me di cuenta de que no estaba siendo yo misma, no actuaba como yo, actuaba como la vocesita me decía que actuara, así que después de pensarlo y pensarlo decidí dejar de escucharla y darle la espalda, porque después de todo no iba a dejar que ella dominara hasta mi
modo de pensar, después de darle la espalda a la incómoda y detestable voz, supe que había sido engañada todo ese tiempo, nada ocurría como yo lo veía, todos los demás tergiversaban los hechos, todos y esa voz aún más, ¿ella era la causante de todo?. ¿O yo por hacerle caso con los ojos cerrados?... Ya no interesaba de quien había sido la culpa, ya no se podía hacer nada mas que actuar como si nada, además culpando a los demás no iba a lograr nada, quise darle frente a la voz, estaba totalmente cambiada, me mostró su verdadera cara, era sínica, se ocultaba con su máscara de angel y criticaba todo... ella era lo que decían los demás, lo falso de todas las personas que te alagan cuando estás con ellas y cuando las dejas te destruyen, y si, logró arrastrarme y convertirme en una más del monton, cuando estuve con ella todo era bonito, y cuando la dejé todo se convirtió en un infierno, pero no, no iba a irme con ella de nuevo, no iba a cambiar mi mundo solo para que los demás tuvieran una buena opinión de mi,así que la enterré, deje de escucharla, y murió para mi, total esa tonta voz creía que yo no sería nada sin ella pero terminó siendo todo lo contrario, ella dejó de ser "algo" sin mí y sin mi atención,
ya la enterré y no pienso darle mi vida de nuevo, soy mía, única y distinta, no del montón y ya nada me va a arrastrar nuevamente...